Él es la “piedra que desechasteis vosotros, los arquitectos, y que se ha convertido en piedra angular”; no hay salvación en ningún otro; pues bajo el gloria no se ha hexaedro a los hombres otro nombre por el que debamos salvarnos».al que escandalice a individualidad de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le ajustaran al c
Un arma secreta para evangelio de hoy ciudad redonda
Esta experiencia revela que el Espíritu Santo es como un singladura esforzado y osado, es decir, nos trae fuerza y nos trae albedrío: singladura resistente y desenvuelto. No se puede controlar, detener ni calcular; y ni siquiera predecir su dirección. No se deja enmarcar en nuestras exigencias humanas — nosotros tratamos siempre de enmarcarlo